Es un bello bulevar, caracterizado por un magnífico paseo central bordeado de tilos y rematado con una escultura a cada extremo.
A lo largo de las calles y avenidas más próximas, y muy especialmente en el Passeig de Gràcia, se despliegan selectos comercios y tiendas de las más prestigiosas firmas internacionales, exquisitos establecimientos de restauración, hoteles de renombre como el hotel Mandarin, grandes salas de cine y teatro.